Creencias Fundamentales De La Iglesia Adventista Del Séptimo Día

14. La Unidad En El Cuerpo De Cristo

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14 Unidad en el Cuerpo de Cristo

 

Los Adventistas del 7º Día creen que la iglesia es un cuerpo con muchos miembros, llamados de toda nación, tribu, lengua y pueblo. En Cristo somos una nueva creación; las distinciones de raza, cultura, educación y nacionalidad, así como las diferencias entre posiciones elevadas y humildes, ricos y pobres, varones y mujeres, no deben producir divisiones entre nosotros. Somos todos iguales en Cristo, el cual por un Espíritu nos ha unificado en una comunión con él y los unos con los otros; debemos servir y ser servidos sin parcialidad ni reservaciones. Por medio de la revelación de Jesucristo que presentan las Escrituras, compartimos la misma fe y esperanza, y proyectamos un solo testimonio ante todos. Esta unidad tiene su fuente en la unidad del Dios triuno, el cual nos ha adoptado como sus hijos.

 

Cuando Jesús terminó su ministerio en el mundo (Jn.17:4), no dejó por eso de preocuparse de la condición de sus discípulos, aun el atardecer antes de su muerte. Los celos produjeron entre ellos discusiones sobre quien era el mayor, y cuál de ellos ocuparía las posiciones más elevadas en el reino de Cristo. (Luc.17:10). Aún mientras el Salvador estaba en el Jardín del Getsemaní, su preocupación más importante era la unidad de la iglesia (Jn.17:6, 21,23)

La Unidad de la Biblia y la Iglesia:


La Unidad del Espíritu: El Espíritu Santo es la fuerza motriz que impulsa la iglesia a la unidad. (1Cor.12:13, Efe.4:3-6) Las siete repeticiones de la palabra uno, enfatizan la unidad completa que pablo tiene en mente. La iglesia unida tiene una esperanza (Tito 2:13) esta esperanza provee el motivo para el testimonio unido (Mat.24:14; 1Jn.3:3) por medio de una fe común todos llegan a ser parte del cuerpo (Rom.6:3-6) Todos los aspectos de la unidad eclesiástica están fundados en la unidad del Dios triuno. (1Cor.12:4-6)


El Alcance de la Unidad: Los creyentes experimentan unidad de mente y juicio (Rom.15:5,6; 1Cor.1:10; 2Cor.13:11)


La Unidad en la Diversidad: La unidad bíblica no significa uniformidad. El ejemplo del cuerpo humano demuestra que la unidad de la iglesia existe en la diversidad. (1Cor.12:11) Para cumplir su misión la iglesia necesita la contribución de todos los dones. En la naturaleza, la vid con sus pámpanos provee una ilustración de unidad en la diversidad. (Jn.15:1-6) todos reciben alimento de la misma fuente, y asimilan las mismas propiedades vivificantes.


Si bien hay diferentes temperamentos en la iglesia, todos obran bajo la dirección de una cabeza. (1Cor.12:6)


La Unidad de la Fe: La diversidad de dones no significa diversidad de creencias. Apoc.14:12

¿Cuán importante es la Unidad de la Iglesia?


La unidad es esencial para la iglesia. Sin ella, fracasará en el cumplimiento de su sagrada misión.
La unidad hace que los esfuerzos de la iglesia sean efectivos: En este mundo, desgarrado por la disensión y los conflictos, el amor y la unidad entre los miembros de iglesia de diferentes personalidades, temperamentos y disposiciones, testifica a favor del mensaje de la iglesia con mayor poder que ninguna otra cosa. (Jn.13:35; 17:23)


La unidad revela la realidad del reino de Dios: La iglesia verdaderamente unida revela que sus miembros son serios en su expectativa de vivir juntos en el cielo. (Sal.133:1)


La unidad muestra la fortaleza de la Iglesia: Una iglesia es verdaderamente próspera y fuerte cuando sus miembros están unidos con Cristo y los unos con los otros trabajando en armonía por la salvación del mundo. (1Cor.3:9) Podemos considerar como un ejemplo una orquesta de música.

El logro de la Unidad:


Para que la iglesia experimente unidad, tanto la divinidad como los creyentes deben cooperar para producirla.


La fuente de la unidad:


1. El poder preservador del Padre. Jn.17:11
2. La gloria del Padre que Cristo les impartió a sus seguidores. Jn.17:22
3. La morada interior de Cristo en los creyentes. Jn.17:23


El Espíritu Santo como unificador: En su carácter de Espíritu de Cristo y el Espíritu de verdad, el Espíritu Santo produce unidad.


1. El foco de la unidad: Cuando el Espíritu entra en los creyentes, hace que trasciendan los prejuicios humanos basados en la cultura, la raza, el sexo, el color, la nacionalidad y la posición social. (Gál.3:26-28)
2. El papel de los dones espirituales en el logro de la unidad: Cuando Cristo comenzó su obra mediadora en el cielo, se aseguró que el blanco de unir a su pueblo no era una ilusión. A través del Espíritu Santo, impartió dones especiales específicamente destinados a establecer la unidad de la fe entre los creyentes. (Efe.4:3,11-14,16)
3. La base de la unidad: Es la verdad centrada en Cristo. (Jn.15:26; 14:6; 16:13; 17:17 Cuando esta verdad, tal como es en Jesús, mora en el corazón, lo refina, lo eleva y purifica la vida, eliminando todo prejuicio y toda causa de aflicción.


El nuevo mandamiento de Cristo: Tal como sucedió con el hombre, la iglesia fue hecha a la imagen de Dios. Tal como cada uno de los miembros de la Deidad ama a los otros, así también los miembros de la iglesia se amarán entre sí. (Mat.22: 39) Juan.15: 12 (13:34) dicho de otro modo: Yo les pido a Uds. Que no hagan valer sus derechos, que no se empeñen en recibir lo que les corresponde, y si no, llevar el caso a los tribunales. Les pido que entreguen sus espaldas al látigo, que vuelvan la otra mejilla, que soporten las acusaciones falsas, los insultos y las burlas, y que se entreguen para ser maltratados, quebrados, clavados en una cruz y enterrados, si eso es lo que se necesita para amar a otros. En eso consiste amar a otros como yo los amo a Uds.


1. La posibilidad imposible: Juan 12:32, La unidad en el cuerpo de Cristo tiene aspectos de encarnación: La unidad de los creyentes con Dios por medio de la Palabra que se hizo carne. También tiene aspectos de relación: la unidad de los creyentes por medio de sus raíces comunes en la Vid. Y finalmente es arraigada en la cruz: el amor del Calvario que nace en los creyentes.
2. Unidad en la Cruz: Únicamente cuando nos damos cuenta de que no amamos como Jesús y que en verdad no podemos hacerlo, entonces admitimos nuestra necesidad de su presencia permanente. (Jn.15: 5) En la cruz nos damos cuenta de que Cristo no murió exclusivamente por nosotros, sino por todos los habitantes del mundo. El Calvario significa: Sobrellevad los unos las cargas de los otros (Gál.6: 2)


Pasos hacía la unidad:


1. Unidad en el hogar: Si en el hogar aprendemos a ejercer dirección sabia, bondad, gentileza, paciencia y amor con la cruz en su centro, entonces podremos aprender la aplicación de esos principios en la iglesia.
2. Procúrese la unidad: Nunca lograremos obtener unidad a menos que trabajemos concienzudamente por lograrla. Y nunca podremos sentirnos complacidos y considerar que ya la hemos logrado. Debemos orar cada día por unidad, y cultivarla cuidadosamente.
3. Trabajemos unidos hacía un blanco común: La iglesia no experimentará la unidad, hasta que, actuando como un solo hombre, se empeñe en la proclamación del evangelio. En su ministerio Cristo unió la restauración del alma con la restauración del cuerpo. (Luc.9: 6; 10:9). Algunos piensan que la unidad implica la consolidación en procura de la eficiencia. Sin embargo, la metáfora del cuerpo indica que cada órgano, grande o pequeño, es importante.
4. Hay que desarrollar una perspectiva global: Una iglesia no exhibe verdadera unidad a menos que se halle activamente envuelta en el fortalecimiento de la obra de Dios en todo lugar del mundo.
5. Evítense actitudes que dividen: Las actitudes de orgullo, egoísmo, confianza propia, suficiencia propia, superioridad, prejuicio, crítica, denunciación y acusaciones mutuas entre los creyentes, contribuyen a la desunión en la iglesia. Una nueva mirada a la cruz, puede renovar el amor de los unos por los otros (1Jn.4:9-11; Gál.5: 16,22,23). Santiago advierte contra otra raíz de desunión. (Sant.2: 9) Por cuanto Dios es imparcial (Hech.10: 34, Mat.25: 40)


Los cristianos estamos llamados a que unidos en pensamiento y misión, extendamos las manos en un esfuerzo redentivo a nuestros hermanos y hermanas de todo el mundo. (Apoc.14: 6)
 

 

 

Creencias fundamentales de la I.A.S.D.